Los niños que están creciendo necesitan estabilidad emocional para desarrollarse de manera sana y equilibrada, sin embargo la violencia que viven en su casa los sumerge en un ámbito profundo de inseguridad y desconfianza, que los limita para poder ser adultos exitosos. Los lactantes y niños pequeños que son testigos de violencia presentan constantemente irritabilidad, inmadurez conductual, problemas del sueño, angustia emocional permanente, terror de estar solos, conductas regresivas en el caminar, el hablar o en el control de esfínteres. Los niños en edad escolar pueden presentar enuresis (aún se orinan en la cama por las noches) y problemas del habla como tartamudez. La presencia de la violencia en casa, afecta el desarrollo normal del niño su autonomía y su personalidad. Más de la mitad de los hombres que maltratan a sus mujeres maltratan también a sus hijos, la amenaza o la violenta directa sobre los niños e
Este espacio busca ayudar a todos los que sufren algún tipo de violencia física, psicológica, sexual, económica o de género, y que por ser vulnerables son víctimas de este mal. Aquí encontrarán información que les permita darse cuenta de la realidad en la que viven para comenzar a salir de ella.